Estudos sobre Violência no Futebol

 De repente surgiram no país uma série de "especialistas" em violência no futebol.

Com os especialistas surgiram "achismos" , ideias mirabolante dignas do professor Pardal e, ainda, busca por culpados como bebidas e Torcidas Organizadas.

Com a palavra que estuda e entende do assunto:

 

"Torcidas organizadas agora recebem o rótulo de facções, numa tentativa de relacioná-las ao mundo do crime. A realidade é diferente. Torcedor organizado não é bandido!",

"Costuma-se generalizar, mostrando que as mortes tem a ver só com as torcidas, o que não é verdade. Por isso, pregar a extinção das organizadas para estancar a violência é a mesma coisa que defender o fim do senado para acabar com a corrupção."

(REIS, H. H. B. . As torcidas organizadas não são as (únicas) culpadas. Revista Galileu, Nacional, p. 96 - 96, 01 set. 2009.)

“As manifestações violentas envolvendo torcedores de futebol em dias de jogos, dentro ou fora dos estádios, são atualmente um problema de segurança pública e um objeto de pesquisa da sociologia do esporte em vários países, já que o fenômeno reúne as característica de estabilidade e persistência, ocorrendo com regularidade, e tendo como lugar os estádios de futebol e as suas imediações, não sendo raras também as manifestações violentas em outros locais das cidades onde ocorrem jogos”

(Heloisa Helena Baldy dos Reis (2006))

“Existen dos grande teorias apoyadas em sendas escuelas interpretativas del comportamiento humano que pretenden explicar la agresividad. Por un lado encontramos com Konrad Lorenz (Premio Nobel de Medicina, 1973), que opina que la agresividad es un instituto que tienen los hombres y que, además, es uma cualidad necesaria. Es un impulso que puede ser objeto de canalización, reorientación o situalización y precisamente por medio de alguno de estos caminos peude ser reeducada la agresividad humana. Frente las teorias de Lorenz aparecen las escuelas psicológicas llamadas del aprendizaje que critican la tesis instintiva de la agresividad, porque deienden la teoria de que la agresividad es uma conducta aprendida (Hacker, 1973). En cualquiera de los casos se insiste por muchos pedagogos y formadores deportivos que el deporte constituye la mejor via para canalizar las frustraciones que experimentan los individuos, es como uma válvula de escape de toda uma tensión acumulada y que se hace preciso liberar. Frente a este opinión, Berkowitz (1983) demuestra que la realidad evidencia precisamente lo conmtrario ya que la competición deportiva no reduce necesariamente el riesgo de violencia y puede incrementar la probabilidad de brotes de agresión por esto el deporte no es el camino real que conduzca a la paz y a la armonia social. No podemos olvidar, tampoco, como señala el sociólogo del deporte García Ferrando (1985) que a pesar de la aparente ubicuidad de los actos violentos em el deporte competitivo hay que reconocer que se trata más de un fenomeno aparente que real, em el sentido de que em términos estrictamente estadísticos, sólo uma pequeñisima proporción de las competiciones deportivas que se celebran regularmente acaban de forma tumultuosa. Sin embargo, lo contrario si es cierto, que son muchas las competiciones deportivas que actuan como válvulas de seguridad, como liberadoras de tensiones que crean solidariedades colectivas, etc.”

(Andreu Camps Povil)

 

 “Em uma perspectiva macro, precisamos denunciar, como geradores da violência, a influencia que o crescente empobrecimento da grande maioria da população mundial vem sofrendo, principalmente em países do hemisfério sul, e o aumento acelerado das desigualdades sociais nesses mesmos países. Esses dados permitem-nos a interpretação de que a violência se vem configurando uma problemática de ordem estrutural. Já em uma perspectiva intríseca, é necessário analisar o futebol e  à organização do espetáculo futebolístico que são fatores geradores de violência”.

“De forma rápida, em uma análise micro pode-se dizer que os fatores greadores de violência relacionada ao futebol são: a impunidade, a falta de infra-estrutura dos estádios, a falta de competência na organização dos espetáculos futebolísticos, a irresponsabilidade dos promotores de eventos esportivos, os limites dos agentes de segurança que trabalham em estádios de futebol, além da falta de uma política pública de segurança preventiva."

 (Heloisa Helena Baldy dos Reis (2006))

1. Los efectos de despersonificación – las actitudes y emociones de las personas despiertas por los gritos.
2. La disminución del control social – la sensación de anonimato por estar en una masa.
3. La ilusión de universalidad – la ilusión de estar actuando correctamente, ya que todos hacen lo mismo.
4. Los mecanismos de irritación – el comportamiento de unos interfiere en lo de los otros.
5. Factores desencadenantes de violencia – el hecho de estar en pie aumenta el riesgo de violencia, porque los movimientos agresivos son más difíciles de ser ejecutados cuando se está sentado.
6. La presencia emocional – los diversos tipos de emociones vividas por espectadores deportivos.
7. Las condiciones de la víctima – pertenecientes al otro equipo.
8. La influencia del alcohol y de las drogas – aumentan la probabilidad de comportamientos agresivos.  

(Jimenez Jimenez ( España. 1990))

“La palabra violencia etimológicamente proviene del latín violentia – raíz semántica vis = fuerza – y significa opresión, imposición de alguna cosa a otra persona o a otras personas,  por intermedio del empleo de la fuerza, cualquier que sea su tipo, su sustancia, forma o sentido: fuerza de los poderes social, económico, jurídico o político, fuerza física, fuerza simbólica o de cualquier otra naturaleza que se quiera.”

(Mauricio Murad (2007))