Una Pasión Nacional Dividida: El Fútbol Espera por la Novela

 Una Pasión Nacional Dividida: El Fútbol Espera por la Novela

Por Gustavo Lopes Pires de Souza

@gustavolpsouza

Brasil es conocido como el país del fútbol, una pasión que atraviesa generaciones, crea héroes y lleva multitudes a las calles. Sin embargo, curiosamente, el fútbol brasileño, aunque es ese gigante cultural, muchas veces acaba cediendo espacio a otro ícono nacional: la telenovela.

Esto refleja la peculiaridad de nuestra cultura, donde las novelas ocupan el horario estelar y el fútbol, al contrario de lo que se esperaría en un "país del fútbol", se relega a horarios más tardíos. La tradición de la "novela de las ocho", que irónicamente empieza a las nueve, es un hito en la televisión brasileña.

Este retraso simbólico revela el poder que las telenovelas ejercen sobre el público, al punto de influir incluso en el horario de los partidos de la Selección Brasileña. Este viernes, el partido Brasil vs. Ecuador, válido por las eliminatorias de la Copa del Mundo 2026, fue aplazado hasta las 22:00 para que se emitiera el último capítulo de la novela Renacido.

Esto ilustra cuán profundamente están arraigadas las telenovelas en nuestra rutina, al punto de ser priorizadas incluso en eventos de repercusión internacional, como un partido decisivo de fútbol.

Es interesante pensar que, incluso en un escenario donde el fútbol debería dominar toda la atención, es la novela la que marca el ritmo. Y esto no es de ahora. La alianza entre el fútbol y las novelas es antigua, pero el protagonismo de la pantalla chica se ha mantenido firme, creando una dinámica única en la que ambos coexisten, pero con la novela siempre un paso adelante cuando se trata del horario estelar.

Esta realidad refleja un poco la diversidad de intereses del público brasileño, que es capaz de ser tan apasionado por el fútbol como por la ficción melodramática de las telenovelas. Quizás lo que explique esta dualidad sea el hecho de que, tanto en el fútbol como en las novelas, el brasileño busca emoción, historias, héroes y villanos, elementos presentes en ambos universos.

Sea como fuere, el hecho es que, en Brasil, cuando se trata de decidir entre el último capítulo de una novela y un partido de la Selección, la TV Globo y la tradición aún hacen que el capítulo final de una novela tenga más relevancia. Puede parecer paradójico, pero es solo una característica más de nuestra compleja, y al mismo tiempo fascinante, cultura popular.